¿TIENE TÚ NEGOCIO ALGUNA VENTAJA COMPETITIVA?

Una empresa tiene una ventaja competitiva cuando esta ventaja es única y le permite diferenciarse de sus competidores, haciendo que obtengan mejores resultados y mejorando su posición competitiva en el mercado. Por este motivo, establecer una ventaja competitiva es esencial para el desarrollo y el éxito de una empresa.

Pero cómo podemos saber si nuestro negocio posee una ventaja competitiva. Es aquí cuando entran en juego las denominadas cinco fuerzas competitivas de Porter:

  • Poder de negociación de los clientes: cuanto más se organicen los consumidores más exigencias impondrán estos con respecto a los precios, calidad o servicios. Esto llevará a que el cliente tenga una mayor potestad para elegir cualquier otro producto o servicio de la competencia. Sin embargo, las empresas pueden llevar a cabo medidas para incrementar su ventaja competitiva, como implementar un programa de lealtad.
  • Poder de negociación de los proveedores: cuanto más se organicen los proveedores dentro de su sector, cuantos más recursos relevantes posean y cuenten con más condiciones sobre precios y tamaños de los pedidos, más atractivo será el mercado en el que operan. Esto determina la facilidad para los proveedores de variar precios, plazos de entrega, formas de pago e, incluso, el estándar de calidad del producto o servicio que ofertan.
  • Amenaza de nuevos competidores: que una empresa posea o no una ventaja competitiva también depende de la accesibilidad de las barreras de entrada que posee la industria en al que opera la empresa. Si estas barreras son altas, será más difícil que entren nuevas empresas, por lo que la ventaja competitiva será mayor.
  • Amenaza de productos sustitutivos: si tu empresa posee un producto o servicio difícil de sustituir por parte de la competencia, se puede decir que tu empresa presenta una ventaja competitiva, ya que ningún producto o servicio satisface las necesidades que tienen los consumidores de similar forma que el que oferta tu empresa. Esto puede conseguirse, por ejemplo, aumentando la calidad del producto.
  • Rivalidad entre los competidores actuales: analizar la rivalidad existente con nuestros competidores permite a la empresa obtener ventajas y buscar en qué aspectos puede suplantar a la competencia.

Como hemos podido observar, podemos saber si una empresa cuenta con una ventaja con respecto a la competencia gracias al Modelo de las cinco fuerzas de Porter,  realizando un análisis de estas variables y permitiéndonos reaccionar de forma adecuada a las actuaciones de la competencia.